Una maldición (recurrente, sin preferencias, e incolora) - 1

-TRADUCIDO Y EDITADO de Fair Mormon, sujeto a revisiones y/o actualizaciones posteriores.

QUE ERA EXACTAMENTE LA MALDICIÓN LAMANITA?

-PRIMERA PARTE

El Libro de Mormón habla de una maldición que (en aquel entonces) está siendo puesta a los Lamanitas:

Y él había hecho caer la maldición sobre ellos, sí, una penosa maldición, a causa de su iniquidad. Porque he aquí, habían endurecido sus corazones contra él, de modo que se habían vuelto como un pedernal; por tanto, ya que eran blancos y sumamente bellos y deleitables, el Señor Dios hizo que los cubriese una piel de color obscuro, para que no atrajeran a los de mi pueblo. (2 Nefi 5:21)

Es afirmado por algunos que la Iglesia creyó que los Lamanitas que aceptaban el Evangelio se volverían de piel clara y que el folclor Mormón dice que los nativos Americanos y los Polinesios portan una maldición debido a los errores de sus ancestros.

Un crítico pregunta:

"De acuerdo a el Libro de Mormón una piel oscura es una maldición impuesta por Dios sobre los injustos y sus descendientes, como un castigo para el pecado. ¿Ustedes concuerdan con esa doctrina? (el Libro de Mormón, 1 Nefi 12:22-23, Alma 3:6, 2 Nefi 5:21-22, Jacob 3:8, 3 Nefi 2:15-16, Mormón 5:15; las referencias a los "Lamanitas" son presuntas de estar refiriéndose a los "indios" nativos americanos)"

AUNQUE LA MALDICIÓN DE LOS LAMANITAS ES A MENUDO ASOCIADA DIRECTAMENTE CON SU COLOR DE PIEL, PUEDE SER QUE ESTA ASOCIACIÓN FUE PENSADA EN UN SENTIDO MUCHO MAS SIMBÓLICO QUE EL QUE LOS MIEMBROS AMERICANOS MODERNOS TRADICIONALMENTE ASUMIERON

La maldición en sí , vino sobre ellos como un resultado de su rechazo al Evangelio.

Era posible ser sujeto a la maldición, y recibir una marca, sin que estas estuviesen asociadas a un cambio en el color de piel, como es demostrado en el caso de los Amlicitas.

La maldición es aparentemente una separación del Señor.

Una lectura atenta del texto del Libro de Mormón hace indefendible considerar que el color de piel, en un sentido literal, fue alguna vez la maldición.

Como mucho, el color de piel era visto como una marca, y pudo bien haber sido que estas descripciones eran mucho más simbólicas y culturales que literales.

CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE LA “MALDICIÓN” Y LA “MARCA” DE LOS LAMANITAS?

La maldición y la marca son dos cosas distintas.

La Biblia en realidad si usa la palabra <maldición> para describir un castigo a ser infligido como el resultado de la desobediencia a los mandamientos de Dios.

Por ejemplo, en Deuteronomio vemos:

Y Jehová enviará contra ti maldición, quebranto y reprensión en todo cuanto pongas tu mano y hagas, hasta que seas destruido y perezcas prontamente a causa de la maldad de tus obras por las cuales me habrás dejado. (Deuteronomio 28: 20)

John A. Tvedtnes nota la distinción entre la maldición y la marca que el Señor puso sobre los Lamanitas:

De este modo queda cumplida la palabra de Dios, porque estas son las palabras que él dijo a Nefi: He aquí, “he maldecido” a los lamanitas, y “pondré sobre ellos una señal” para que ellos y su posteridad queden separados de ti y de tu posteridad, desde hoy en adelante y para siempre, salvo que se arrepientan de su iniquidad y se vuelvan a mí, para que yo tenga misericordia de ellos. (Alma 3: 14) (énfasis añadido).

Refiriéndose al pasaje de arriba, Tvedtnes nota la distinción entre el que los Lamanitas hayan sido maldecidos “y” el que tengan la marca puesta sobre ellos.

El Libro de Mormón, sin embargo, algunas veces si llama “una maldición” a la marca, como se muestra en Alma 3: 6-7:

Y la piel de los lamanitas era obscura, conforme a la “señal que fue puesta sobre sus padres”, la cual fue una “maldición sobre ellos por motivo de su transgresión y su rebelión” en contra de sus hermanos Nefi, Jacob, José y Sam, que fueron hombres justos y santos.

Y sus hermanos intentaron destruirlos; “por lo tanto, fueron maldecidos; y el Señor Dios puso una señal sobre ellos”, sí, sobre Lamán y Lemuel, y también sobre los hijos de Ismael y en las mujeres ismaelitas. (Alma 3: 6-7) (énfasis añadido).

Aunque este pasaje se refiere a la marca como la maldición, luego hace una distinción entre la maldición y la marca.

Estos pasajes también indican que la maldición fue aplicada antes que la marca.

LA MALDICIÓN APLICADA A LOS LAMANITAS FUE QUE ELLOS ESTABAN SEPARADOS DE LA PRESENCIA DEL SEÑOR

Tvedtnes sugiere que la maldición aplicada a los Lamanitas fue que ellos estaban separados de la presencia del señor.

Nefi manifiesta:

Por tanto, se cumplió la palabra que el Señor me habló, diciendo: Por cuanto ellos no quieren escuchar tus palabras, serán separados de la presencia del Señor. Y he aquí, fueron separados de su presencia. (2 Nefi 5:20)

Un grupo de Nefitas que se unió a los Lamanitas lo ejemplifica.

Su color de piel no fue cambiado a causa de su rechazo del Evangelio sin embargo la maldición fue aplicada a ellos.

Hugh Nibley describe la situación de los Amlicitas:

En consecuencia se nos dice (Alma 3:13-14, Alma 2:18) que si bien los sujetos caídos "se pusieron ellos mismos la señal," fue, no obstante, Dios quien los estaba marcando: "pondré sobre ellos una señal," etc. Tan natural y humano fue el proceso que nada parecía milagroso al observador ordinario, y "los amlicitas no sabían que estaban cumpliendo las palabras de Dios cuando empezaron a marcarse;... fue menester que la maldición cayera sobre ellos" (Alma 3:18) . Acá Dios coloca su marca sobre las personas como una maldición. Con todo, es una marca artificial que en realidad ellos colocaron sobre sí mismos. La marca no era una cosa racial pero era adquirida por "todo el que se dejaba desviar por los lamanitas" (Alma 3: 10).